sábado, 3 de julio de 2010

La última canción de Leticia:

“No sé bien cuál era mi ubicación dentro del aula, solo supe que el recuerdo de aquellos años de mi vieja primaria regresaron…”

Corría el mes de noviembre. Leticia, una señora que no se parecía en nada a la edad que llevaba encima, estaba emocionada, porque fue seleccionada por el director para que interpretara una canción en un acto escolar. Una canción a su elección y que la única condición, que el director le ponía fue que en ese tema tenía que reflejar su vida en la escuela. Es decir, su trayectoria como docente. Leticia, pronto se dio cuenta de que la “elección libre del tema” estaba restringida, pero acepto la condición (quizás porque no le quedaba otra, o porque lo tomo como un verdadero desafío, a fin de cuentas, haber sido elegida, ha sido para ella una verdadera oportunidad).

Durante la primera semana de noviembre, la maestra estaba algo inquieta, su presentación debía ser actuada en el último día de aquél mes. Mientras dictaba clases en el cuarto grado, se le ocurrió la idea de que cada alumno de su curso dijese una frase. Josecito, un niño algo travieso, le formulo la siguiente pregunta: - ¿Seño, pero para que usted quiere una frase? – A modo de secreto, y sin dar vueltas, la docente les comento a los chicos que debía hacer una canción antes de fin de mes –José, fui seleccionada y solo les pido que agarren una hoja, y en ella coloquen una frase, que diga lo que ustedes piensan de los maestros en general, y me la entreguen antes de terminar la clase – Dijo la maestra – otra pregunta, esta vez de Cecilia, una niña que casi siempre, prestaba la atención necesaria le dijo: - ¿Seño, no le parece mejor que nosotros la ayudemos a armar esa canción? – La docente, se queda por varios minutos pensando, y ya que había “confesado” sobre su actuación, le manifestó: - Mira Cecilia, tengo una condición a la que le debo hacer caso, porque la acepte y es que el tema, debe hablar de mis años de docencia en esta escuela.

Los alumnos se maravillaron con esa condición, y le avisan a la señorita que la idea era más que interesante, por lo que no solo les piden que se deje ayudar, sino que ellos se iban a poner a trabajar a la par de ella. Leticia un poco sorprendida, y antes que nada pregunto: - ¿Ustedes saben lo que yo pase en esta escuela? – No – Responden los chicos, a coro - Y entonces no pueden ayudarme mucho en esto, por eso solo les pedí una frase de cada uno, para que me tiren una idea y eso era todo. -Sentencia la maestra.
Pedro, era el más ayudante de la clase y le explico a la seño que ellos querían saber si estaban aptos para crear algo…una imaginación…un reflejo…de lo que les parecía que la docente viene haciendo – La conocemos desde el anteaño pasado y sabemos más o menos como es, por favor déjenos que la ayudemos – Pedro mira al resto de sus compañeros y les pregunta – Chicos, respondan: ¿están de acuerdo? –y un categórico sí, fue la respuesta por parte de los demás.

A Leticia (Un tanto contenta por el entusiasmo que despertó en sus alumnos) no le quedo mas remedio y les dijo que tenían como plazo ésta, y la siguiente semana, para que les trajeran lo que hayan escrito. Ella también haría el suyo.

La semana fue trascurriendo, hasta que finalmente llego el día clave.
Leticia entra al aula, saluda con un: “Buenos días” y se sienta, y para su sorpresa, se encontró con varias hojas apiladas sobre su escritorio, y en tono alegre dice: - Creo que no hace falta preguntar si trajeron la canción, ¿no? – Los chicos se ríen cómplices de la humorística pregunta.
Ella deja este tema y comienza a dar clases. Pasan las horas y suena el timbre de salida. Leticia agarra la pila de escritos y les avisa a sus alumnos que de todos iba a ser un rejunte y armaría la canción definitiva. Los chicos, avergonzados, les pareció buena la idea y se marchan.

La docente llega a su casa. Ella era una mujer que vivía sola, desde que se había separado de su segundo marido. Sus hijos, ya grandes, optaron por irse a vivir solos, pero que, cada tanto la visitaba.

Se sienta en el comedor, y después de almorzar algo, y actualizarse con las noticias que le ofrecía su canal favorito de su televisor, se dirige hasta su portafolio y saca las canciones de los chicos y comienza a leer una por una…las letras estaban teñidas de una cálida emoción, y de una inocencia importante…pero fue la última canción la que más la conmovió, a tal punto de soltar una par de lagrimas, por notar como una pequeña niña, que lleva su mismo nombre de pila, había escrito semejante letra, que llevaba el titulo de:

Reflejo docente:
Los años de mi docencia nunca fueron fáciles
El amor y el cariño siempre estuvieron a mi alcance
El tiempo es un ingenuo amigo
Que cada tanto en cada clase
Hacían notar el reflejo docente de mi parte.

Mi docencia estuvo puesta en la sonrisa
Aunque sufrí por un dolor
De ver tanta marginación
Que hacen nacer a la superación
De decirme a mi misma que esto
Se puede cada día ver mejor

El esfuerzo fue nutriendo mis ganas
La voluntad despertada a la templanza
De transmitir en pocas palabras
La cantidad de acciones que pueden ser proyectadas

Fue y será mi condición educativa
Fue y será mi fortaleza de continuar
Reflejando mi docencia en esta querida escuela.


Leticia cerró los ojos por un instante, y recordaba sus años durante su infancia. Una pequeña Leticia le había hecho regresar a esos años de inocencia. Agradeció al cielo por haber elegido el camino de ser docente y haber cumplido su meta.
Las interminables oportunidades que cada vez notaba en su escuela, la iban llenando de coraje y de fuerza para continuar pese a los duros años de crisis que sufrió el establecimiento. Luego, tras esa breve reflexión a solas, y regresando a su realidad actual, se dispuso a ponerle la melodía a esa letra, mediante una guitarra criolla, que cada tanto tocaba.

La señorita, al día siguiente felicito a sus alumnos y les aviso que la canción ya estaba armada…y una pronta actuación la esperaba.
El último día del mes llego, y en pleno acto, le toco su turno y la docente empezó a cantar. Leticia, la niña, al oírla se dio cuenta que el tema le pertenecía y sonrió felizmente.
Al terminar el tema, fue ovacionada por el público que se hizo presente en el lugar y el director de la escuela la saludo y le pregunto: ¿cuándo Usted noto que tenía alma de poeta?.
Ella responde: - “Fue cuando me di cuenta de que hay una pequeña niña Leticia en mi vida, de carne y hueso y unos preciosos ángeles la acompañaron hasta llegar a mí.”

Compromiso personal y Las Madres: (Articulo sobre algunos sucesos históricos)

“Todo parecer…toda búsqueda, está situada más allá de la frontera mental de un compromiso a deducir en nuestro tiempo. Las marionetas del silencio se guardan en el cajón del olvido, tratando de quedarse allí bien metidas… todo el tiempo que se requiera, simplemente para alzar las voces que quieren expresarse con total libertad” quizás con esta oración empiece a develar ese compromiso personal que cada uno posee, a su manera, y que poco a poco lo va entendiendo con el correr de los años o durante su estadía en este mundo, a continuación y a manera de resumen, te vas a encontrar con algunos episodios de personas que circularon por mi vida, dejándome en claro, cual era (es) su parecer al respecto:

“Sin embargo en tus pies noto alguna fatiga que no te deja avanzar. Sabes, que no te hablo de lo estrictamente físico, más bien podía acusar a tu ingenuidad que debería ya dejar de ser una colectividad de costumbres con las ganas desparramadas en NO moverse a hacer nada de nada de la nada misma para torcer esa manía de fumar hasta que un buen día, como cualquier otro, como el de hoy, los pulmones se empezaron a quejar en la terminal de los abusos festivos de una destrucción azarosa de tu accionar” – comentario que un tío le dijo a una vieja amiga, a quien volví a ver después de mucho tiempo, en un hospital, en tiempos difíciles de una adicción que ella venía arrastrando y tras una tardía búsqueda, encontró en un pariente (no muy lejano que digamos), un modo de recapacitar justo cuando parecía que la brecha de su existir se iba achicando en la profundidad de ese absurdo placer por el pucho.

“La acción te somete a una dura prueba de probabilidad para establecer si de verdad la tenes incorporada en tu frágil memoria, que de vez en cuando se aleja de una responsabilidad generosa del destino, que a medida que avanza te vas arrugando para huir…simplemente huir como un cobarde empedernido de fomentación ruidosa con la excusa frase, anunciando tu posición: “a mí no me interesa nada” dijiste…sabiendo que te mostras como una persona pasiva en diversos aspectos, con la esperanza firme de esperar vaya uno a saber que, sin siquiera mover un dedo para que ese tal efecto, se revierta” - mencionado por Enrique a Eduardo, en una reunión de amigos, cuando la responsabilidad de llevar a cabo cualquier emprendimiento, estaba siempre en duda de éste último.

“Dicen por ahí que la mejor manera de querer intentar cambiar las cosas es cuando con las pelotas bien puestas, SE pretende de algún modo y de buena manera participar de una elección de vida dentro de una hilera de sociedades que se amontonan con tal de querer salirse del foco estancado. Debes situar allí a tu óptica misión, para que se renueve, provista por una estimulación externa, que espera que te conviertas definitivamente en un participante activo para la sociedad (que no quiere saber nada de cagones, o peor aún, de miedosos). Porque siempre se necesita de los demás (“los demás, también somos nosotros”) como un poeta ya lo dijo y muy bien: “ningún pájaro puede volar alto, usando apenas sus propias alas””- Utilización de algunas frases, que Norberto, dejo entrever, tras conocer la opinión de Irina, haciendo que ella, reflexione y recapacite sobre su angustiosa manera de encarar las cosas, en un lugar de estudio, en un encuentro de debates intensos sobre la educación en la Argentina, con más de 20 personas presentes en la sala, con los oídos bien despiertos y dispuestos a escuchar a todos y cada uno de sus partícipes.

“Vuelvo a insistir en el juego que nos compete, porque formamos parte de él, con un argumento sólido de lo que se trata en realidad…Todos estamos sumergido a la hora de actuar…a la hora de brindar un comentario o una simple opinión.
El tema por ahí pasa por marcar a fuego lento una convicción...o una ideología de cumplir con el deber a raja tabla… sabiendo que cada quien la tiene en el interior de su existencia impregnada en el alma que no se alarma…para qué?…habrá entonces que ejercitarla de la mejor manera…te repito…de la mejor manera posible… estableciendo tu propio punto de vista con acuerdos y desacuerdos en los debates que se requieran para localizar aspectos positivos para todos. Valioso para cada uno” – Mención hecha por Gerardo a Julieta, en el colectivo, cuando nos dirigíamos a la casa de Eugenia, para celebrar su doctorado en Filosofía y Letras

“La vida esta para pelearla, para ayudarla, para encararla con los desafíos que se plantean allí mismo, en tu lugar de convivencia y no de conveniencia…quizás eso sea lo que la hace aún más interesante…más atractiva…saber que no venís a calentar la silla. Puesto que hay una sencilla razón a nuestra merced y es la de no querer pasar por desapercibido. Claro, me dirás, es tu decisión. Pero sabes que hay dos posibles caminos (que uno después decidirá por cual avanzar, recorriendo su propio camino, siempre lo digo: “nunca vayas por el camino trazado, porque solo el te conduce a donde ya fueron otros”), por un lado están aquellos que luchan por el bienestar común, generalizando a las masas que te ven como una pequeña pieza del motor de las acciones más correctas. Por el otro lado esta aquel señor anciano ya, que tengo como padre, que se quedo con las ganas de hacer las cosas que siempre les pareció que DEBÍA hacer, pero nunca las ejecuto. Por no animarse. Por no molestarse siquiera en ver en que podía ayudar.”
-Sostiene mi madre, en una charla en la vereda con mi viejo y querido abuelo rezongón, yo, sentado, observando y escuchando atentamente. Sigue:
“Nos hacemos los boludos y no provocamos ningún cambio…total dirás, habrá otros. Que bajeza tan grande no?…pertenecer y a la vez no pertenecer. La colaboración se te fue a la mierda porque quería ver en otro lo que no pudo nunca ver en vos. Y la voluntad ni te digo, se quejo de mil maneras (un poco exagerada la expresión, lo sé), porque quería que vos seas alguien que esté a la altura de los acontecimientos que te tocaron vivir porque formas parte, quieras aún cuando no quieras y que en algún momento tenías que hacerte cargo de la importancia de tu actuación en el universo de creaciones, porque de seguro cada quien sentirá la necesidad de cambiar las cosas que cree, a priori, que no están bien y por ende se sujeta a tratar de obrar bien, una solidaridad que nos alimenta como seres nobles llenos de bondad. Pero en tu caso, sos solo una utopía que se quedo en la línea de largada”
– mi madre hace una pausa, y nos avisa que la mesa ya está servida, y una vez que ingresamos a la casa, termina de expulsar un par de palabras más. Mi abuelo en absoluto silencio, escucha:
“No llames al egoísmo, porque ese suele destruir, sino anda y fíjate allá afuera…en tu ciudad, como la brecha entre ricos y pobres se quiere seguir agrandando porque los ricos no conocen la marginalidad y los pobres no conocen el buen comer…por decirte la pelotudez más grande que debe estar ubicada en algún rincón de la razón para que tenga un cierto sentido” – concluye. Mi Abuelo, después de escucharla, solo atina a abrazarla para calmar la tensión y luego le dice:
“La justicia es un tanto…un cachito nomas…ciega, porque solo te muestra la ceguera inevitable de una vasta putrefacción de los humanos que se cagan en el otro y ahí quietitos, está como por ejemplo, un viejo croto aburrido (como lo soy yo - aclara) viviendo a cinco cuadras de la avenida más ruidosa del barrio, en esa calle que da derechito al sol cuando viene asomando por las mañanas, viviendo en el mismo barrio que cambio hasta de nombre, que después de contarte mi historia, es cierto, empapada de frustraciones, se queda rebalsado de recuerdos de joven promesa y un lamento llamado tristeza. - Yo nunca quise formar parte de los cambios que yo mismo podía haber generado. Labure como un condenado toda mi vida y te traje al mundo y eso fue todo. Nunca quise…tal vez porque en definitiva fueron otros los cambios que terminaron de cambiar a uno inevitablemente – Le dice mi abuelo a mi vieja con la resignación por el suelo –Elena me lo repetiste hasta el cansancio y ahí veo, en tus palabras a mi particular vida, tirada en un costado vacio del disfrute y del encanto engañoso por ser un conformista de mierda. – termina por manifestar con una contundencia intachable y arrepentido le pide perdón – mi vieja, en tanto, solo lo calma diciéndole que ya esta, que todo ya paso. Y se vuelven a abrazar.

Nota anexa: Parece mentira, pero es como si hubiese pasado ayer, tenía apenas 15 años y siempre guarde este recuerdo en mi memoria, que hoy me hace retroceder en el tiempo, provocada al ver la imagen de una simple foto, donde están los dos, con sonrisas de por medio, en un pasado muy lejano ya… una intensa conversación, franca, “a calzón quitado” como quien dice, uno reprochando, el otro defendiendo lo indefendible, tal vez porque después de conocer la otra parte de la historia verídica contada sinceramente por él a mí, tiempo después, allá por los 20 años, afirmo hoy a horas de cumplir los 30, y parado frente a su tumba con un ramo de flores en la mano…que también soy un cabron en esto de no querer estimular a mi voluntad. La autocritica ya me la hice hace rato y ahí está dándome con un “caño” a través de este ejemplo de vida. Para poder asumir un compromiso personal en la vida con el sol a cuestas.
Solo fue: Un simple desahogo del mi otro yo

“La reacción de vez en cuando me despertaba del sueño eterno de fantasías de hacer lo que creía que era mejor para mí, sin importarme demasiado, (por forro que parezca) que sucede en los alrededores de mi vida…que no se qué tipo de cambio provoco en mi…lo que se, que sucedió en una tarde, cuando observe a un bohemio empobrecido de soledad y de guita… tal vez esa necesidad de modificar cierto habito apareció en el lugar menos indicado…pero sabes que, bendito sea ese lugar entonces…”porque encontré en él un llamado a la solidaridad, una actitud reciproca del bienestar común y eterno” Cambie mi visión cuando amplié y descubrí profundamente algo que tenía en mi, un corazón sensible del querer ver mas allá de nuestra propia nariz y me di cuenta que también, y por muy chiquito que parezca puedo colaborar en mejorar la escena, primero solucionando viejas internas de la razón propia y luego si, ser ese combustible sagrado de poner el pecho a tanta desigualdad observada desde otro ángulo mas comprensible y en varios pasajes de un pasado existencial, lamente cierta actuación propia y fueron esos lamentos los que no pude evitar y que incluso acompañaron a las lagrimas que solté como un sin sabor elocuente y al fin y al cabo, di vuelta la página cuando ese bohemio empobrecido de soledad y de guita, se libero, ayudado por una mano amiga que se sincero, sin fines de lucro”
–Me lo confiesa Federico, un primo concejal de la ciudad de Bella Vista. Al que estimo mucho, y que tiene una posición mucho más cómoda económicamente hablando.

Para terminar, una opinión de la muestras fotográficas sobre las Madres de Plaza de Mayo, en el Instituto Superior de Formación Docente “Paulo Freire”:

“Ayer me paso lo que a muchos les puede estar pasando. Esa motivación por ver imágenes de mujeres que se encargaron de llevar hasta el altar de sus vidas, con trascendencia internacional inclusive, una eterna lucha emprendedora de no dejarse acallar nunca sus interminables voces durante un tiempo de horror y espanto…cuando la dictadura en la argentina más sangrienta, con cobardes militares a la cabeza, estaban empeñados en imponer “el orden establecido” queriendo perpetuar la palabra silencio absoluto al pueblo. Con sus cómplices inmundos, poniendo a la voz de cualquier ciudadano la cinta de prohibición de manifestar con protesta -basados en la paz por parte de ellas- en contra de un inentendible gobierno de facto, envuelto en el miedo oscuro del encierro a la información verídica.
Donde incluso les han arrancado de sus propias entrañas: a sus amados HIJOS”
“Siempre presumí que conocer la historia nacional hace que alguien pueda tener un juicio valorativo propio y creo que las madres son ese ejemplo que envuelven a una Nación. Ejemplo inagotable por la identidad, la verdad, la justicia y la memoria”

“Busco ejemplos de vida, me conecto con ese infaltable cable a tierra para ir armando mi propia historia. Y lo busco dentro de una sociedad, dentro de mi familia, dentro de los contados amigos que circulan en este andar y me sentí emocionado por tener aún más...tan de cerca un retrato vivo acerca de lo que les toco vivir a esas mujeres del dolor con un soporte enaltecido desde la paz a través de sus marchas y la armonía de encarar a los genocidas con un contenedor apego a las leyes judiciales que hagan meter a todos y cada uno de estos sujetos que dicen llamarse personas a una cárcel efectiva”

“Ellas mantienen una sobrada muestra del espíritu de provocar los cambios necesarios para que se aclare tanta injusticia. Ellas estuvieron y están presentes en la memoria activa que no olvida. Que no olvidaran jamás tanta tragedia nacional y mantienen viva la fiel esperanza por encontrar a sus seres queridos desaparecidos, por la IDENTIDAD de los hijos y nietos que ocultaron estos infames personajes.
Con el valor, la protección y la dignidad como característica fundamental para continuar con toda lucha de búsqueda incansable.
Recuerdo tanta pelea emprendida hacia la verdad, con marchas pacificas, con la recordada ronda de los jueves, desde sus comienzos aun con la embestida de los uniformados mentirosos, escrupulosos de una vergüenza nacional que apagaron vidas, que hicieron desaparecer a otros tantos miles y que más de uno de estos condenados tienen, con su hipocresía a cuesta, el estupor de manifestar que jamás se irán a arrepentir de tamaño daño, tal vez me digo yo, porque nunca tuvieron el pudor de conocer al perdón en su justa dimensión”
La vuelta a la democracia con Alfonsín, un presidente radical emblemático de tanta herida a cicatrizar…la imagen de los años noventa durante un gobierno neoliberal que sacaba de su galera, la ley del punto final y la obediencia debida, entre otras horribles leyes, que hacían acrecentar aun más la impunidad en la sociedad.
También recuerdo cuando un gobierno débil se escapaba de la Casa de Rosada a través de un helicóptero, que provoco e hizo estallar a una sociedad trabajadora y con eso la alteración mediante una represión por la que también en otros tantos miles de personas, tuvieron lastimosamente que atravesar.
“Es una gran verdad la que me hace reflexionar de vez en cuando observo ejemplos de vidas, como son las MADRES DE PLAZA DE MAYO, cuando escucho la frase de la canción “El arrepentido” de León Gieco: “los que matan aprenden a morir de a poco….son y serán un pedazo de vergüenza, un llanto de furia en cadenas” que dejaron sus miserables secuelas en la sociedad que paulatinamente empieza a sentir de que se trata verdaderamente tener por siempre la llama bien encendida justa y equitativa a través de la igualdad, el respeto y la participación de la Democracia en la República Argentina, un País Federal por lejos” JEREMIAS – JUNIO DE 2010

Estatuto para un momento presente:

1) Todos los hombres son diferentes. Y deben hacer lo posible para continuar siéndolo.
2) A todo ser humano le fueron concedidas dos formas de actuar: la acción y la contemplación. Ambas conducen al mismo lugar
3) A todo ser humano le fueron concedidas dos cualidades: el poder y el don. El poder dirige al hombre al encuentro con su destino. El don le obliga a compartir con los otros lo que hay de mejor en sí mismo. Un hombre debe saber cuando usar el poder y cuando usar el don.
4) A todo ser humano le fue dada una virtud: la capacidad de escoger. Quien no utiliza esta virtud la transforma en una maldición. Y siempre los otros escogerán por el.
5) Todo ser humano tiene derecho a dos bendiciones a saber: la bendición de acertar y la bendición de equivocarse. En el segundo caso, siempre existe un aprendizaje que lo conducirá al camino correcto.
6) Todo ser humano tiene un perfil sexual propio. Y debe ejercerlo sin culpa-siempre que no obligue a los otros a ejercerlo con él.
7) Todo ser humano tiene una Leyenda Personal a ser cumplida, y ésta es su razón de estar en este mundo. La Leyenda Personal se manifiesta a través del entusiasmo con lo que hace.
Parágrafo único: se puede abandonar por un cierto tiempo la Leyenda Personal, siempre que no se la olvide y se vuelva a ella tan pronto como sea posible.
8) Todo hombre tiene su lado femenino y toda mujer tiene su lado masculino. Es necesario usar la disciplina con intuición, y usar la intuición con objetividad.
9) Todo ser humano tiene que conocer dos lenguajes: el lenguaje de la sociedad y el lenguaje de las señales. Uno sirve para la comunicación con los demás. El otro sirve para entender los mensajes de Dios.
10) Todo ser humano tiene derecho a buscar la alegría y se entiende por alegría algo que lo deja contento, no necesariamente aquello que deja contentos a los otros.
11) Todo ser humano debe mantener dentro de sí la sagrada llama de la locura. Y debe comportarse como una persona normal.
12) Solamente los siguientes puntos son considerados faltas graves: no respetar el derecho del prójimo, dejarse paralizar por el miedo, sentirse culpable, creer que no merece lo bueno o lo malo que le sucede en la vida, y ser cobarde.
Parágrafo 1: amaremos a nuestros adversarios, pero no haremos alianzas con ellos. Fueron colocados en nuestro camino para probar nuestra espada, y merecen el respeto de nuestra lucha.
Parágrafo 2: escogeremos a nuestros adversarios.
13) Todas las religiones conducen al mismo Dios, y todas merecen el mismo respeto. Parágrafo único: Un hombre que escoge una religión también esta escogiendo una manera colectiva de adorar y compartir los misterios. No obstante, él es el único responsable por sus acciones en el Camino, y no tiene el derecho de transferir a la religión la responsabilidad de sus pasos y decisiones.
14) Queda declarado el fin del muro que separa lo sagrado de lo profano: a partir de ahora, todo es sagrado.
15) Todo cuanto es hecho en el presente afecta al futuro como consecuencia, y al pasado como redención.
16) Quedan revocadas todas las disposiciones en contrario.

A veces…

Hacemos que hacemos, decimos vivir como no vivimos, deseamos para no realizar nada. Nos desconectamos. Nos volvemos temerosos, prevenidos. Anclamos en cosas inútiles para desligarnos de lo importante. Llenos de explicaciones, actuamos poco e intentamos demasiado. Terminamos apreciando más la gambeta que el juego. Nos volvemos confusos y nos amparamos en eso. Buscamos seguridad y la protección y en eso se nos va la vida. Perdimos la inocencia de los sentimientos. Eludimos las miradas. Dejamos de escuchar al corazón. Más duros, menos vivos. Cuidamos tanto nuestra imagen ante los demás que terminamos creyendo que el ego es lo que somos. Escapamos para ir a ningún lado. Le tenemos miedo a los balances. Audaces en lo insignificante y poco aventureros. Guardamos lo mejor, mezquinamente, quien sabe para que momento o para que vida. Creemos aventajar cuando en realidad nos estamos quedando. Hacemos de lo malicioso una virtud y de la inocencia una estupidez. Amamos a los niños, pero no al niño que fuimos. Atados y maniatados nos pensamos libres.

Concedernos la oportunidad para encontrarnos con nosotros mismo, en lo esencial, sin lo accesorio. Es restablecer la conexión perdida. Es probar la alegría que produce la libertad y la ausencia de miedo. Soltar la piedra para escalar la montaña. Dejar de buscar afuera para encontrar adentro. Tenerse.

Sergio Iribarren

Una vez en el tiempo:

Conocí una ruidosa forma de encarar el proyecto inadecuado del ensamble oportuno de la dulzura frente a la bifurcación de palabras que entonaban un cierto apego a amarnos más allá del orden de las cosas que juntos nunca supimos establecer como base. Que origino y dio por cierto, con los argumentos del perdón, conjurado en la persecución de ideas notorias frente a un nuevo estimulo que se incrusto en los oídos constantes del rencor como fuente de toda propaganda vengativa, que hacía suponer que regresarías a mí en menos de lo que uno puede estar imaginando con las culpas del engaño ya mencionados en aquellos días ilusos del sentimiento ahogado en el minibar que montamos en mi casa… La acción contempla tu voracidad virulenta de la declaración impregnada con la acusación disfrazada de tu encanto de derivar la idea del porque un sujeto enamoradizo, sostenía que el amor es eterno en apenas un instante. Porque todo parecer se sitúa allí donde el oscuro corazón desconfiado comienza a tejer los hilos del odio. Presumimos tal vez, que queríamos que todo el universo lo sepa… declarar ante el mundo nuestro ridículo amor incondicional con las alianzas como excusa, o como un cirulo de la ceguera llamativa de la pasión. Quizás eso nos costo y nos corto la vida plena de nuestra libertad, sin protección, sin escudo que haga el favor de bendecir nuestra almas con las diferencias a sol y a sombra. Fuimos personas que individualmente acumulábamos sueños enteros de proyectos de los años que logramos paralizar, en una linda y gris tarde, un tal Cupido, dibujo con una marcada vocación de flechar con intervención, a dos seres para que se amen más allá de las formas…,y ambos permanecimos por mantener una posición dominante sobre las semejanzas impuestas sobre la mesa de la sinceridad compartida, ese punto en común, también visto desde una óptica insegura o tal vez ingenua, que aguardaba los asuntos más emblemáticos de la cátedra del buen decir, con delicadeza, con cierta armonía trasmitida, como una mujer de largo cabello negro y un caballero delgado y de ojos color café, intentaron seducirse con las patrañas que tiene el engaño como común denominador. El tiempo de la verdad. Ese algún tiempo llego con la veracidad de los hechos resumidos. Con sus causas y sus consecuencias. Percibidas desde la madurez del hombre aventurero del cual sigo formando parte, con conclusiones dolorosas que se caen como un fruto pesado del árbol susceptible…árbol de la fantasía que vimos crecer siempre inclinado, que nunca supimos reparar ni con los libros de jardinería apasionada de la ayuda mutua. Siendo un espectador que destrona todo encanto y se queda con la soledad inmersa con su pena a solas. Creer o reventar. Juzgar o llenarse de prejuicios. Amarte sin quitarme el adhesivo adictivo de haber formado parte de vos. Voz poeta de la razón que arrastra una etiqueta de frases que viajan conmigo en el asiento de al lado que está vacío… del micro que me lleva hacia una nueva vida apartada de la ciudad. Elección que costó mucho decidir. Por las continuas peleas entre un viejo amor y la ¿eterna? soledad. Entre un recuerdo partido en mil recuerdos y una fotografía tuya sostenida entre mis manos, que se moja con el alivio que despiertan a las lagrimas derramadas desde la angustia de mis ojos… casi sin consuelo, despidiéndose de un lugar soñado. Para encontrar en otro tal vez un esperanzador cambio favorable en cuestiones sentimentales. Pero la emoción se queda en ese “algún tiempo” o en el mejoramiento del recuerdo de haberte tenido en mis brazos aunque sea, una vez en el tiempo.
De Jeremías para una musa.:( “¿Porque dentro de mi mente, el aroma de su piel, aun persiste?”)

lunes, 23 de noviembre de 2009

Por un instante:

Escribo aquello / que siempre pienso
Escribo con sentimiento / y con convicción
Coordinando la coherencia / con la concentración
De cobijarme en las palabras / como un signo de desvelo
Como un simple rasgo / de una identificación intelectual

Escribo y solo por un instante / Me considero ser un escritor
Escribo con la memoria abierta / Hacia la experimental realización
De mi propia capacitación / de poder manejar
Un lenguaje / sea simple o complicado
Según sea el caso / para obrar / en una hoja de papel
De aterrizar con las puertas desplegadas de mi manuscrito
En la pista de una conciencia de razón / eternamente propia.

Escribo con el gesto y con la gracia
De ser un tipo / al que le encanta
Trasmitir en palabras / todo aquello / donde mi alma se apiada
Con la caballerosidad / de hablar desde un nítido lugar.

Escribo con las sensaciones halladas
De ser alguien que luce un atuendo
Preciso de una llamativa vocación
Que conmigo deambula / con la sutil reacción
De la simple necesidad / de expresarme por escrito
Sin otro motivo para agregar / Sin otro motivo para destacar.

Recuperando la vida:

La lucha que emprendes / a veces nos contagia
Porque hay una razón / un motivo a deshacer
La lucha no es fácil / si te imaginas
Que nos encierra a todos / en un problema social

La pelea que ejerces / resulta muchas veces extensa
La calamidad con la que te enfrentas / es un verdad insólita
Cubre todo de un completo saber / acaso complicado de obtener
Una vuelta mas / nos trasforma en personajes
De un circulo social que ignora al pasar / toda un vergüenza nacional

Te devora la tenencia / te abruma el desaliento
Amontonando ruinas en tu haber / es un golpe que te das
Dentro de tu realidad irreal / te sofocas con astucia
La avaricia del manejo / un dominio ajeno que
No te dejar ser / un libre ser
Que proteja la conciencia / de tomando conciencia

Solo nos queda una cosa por saber / que la pregunta no ha de callar
En la atroz respuesta / de no perder mas tiempo
Sin tener voluntad / te podes caer
Sin tener voluntad / te arruinas igual
Pero déjame decirte que mas tarde que nunca se sale
Tomando las riendas que te dejen ir / a un encuentro anhelado
Respirando aliviado / abrazando a la alegría / recuperando la vida